La tarea de los líderes y gerentes de recursos humanos no solo consiste en la distribución de tareas y el control del desempeño laboral. Otra parte de su trabajo también es crear un entorno de trabajo libre de estrés innecesario que no esté directamente relacionado con las tareas. Los empleadores modernos siempre prestan atención a una cultura empresarial saludable para proteger el bienestar emocional de sus empleados y así mantener alta la productividad del equipo. Aunque cada vez hay menos equipos tóxicos abiertos, el problema de la manipulación en el lugar de trabajo continúa existiendo. Los métodos de influencia psicológica sutil no han desaparecido, simplemente se han vuelto más refinados y menos perceptibles. Veamos cómo reconocer tales métodos y cómo enfrentarlos de manera efectiva.
Tabla de contenido
¿Qué son las manipulaciones?
La manipulación es una forma de influencia encubierta en la que una persona o un grupo intenta dirigir el comportamiento, las opiniones o las decisiones de otros en su propio beneficio. Esto ocurre a menudo sin el conocimiento o consentimiento de los afectados y está diseñado para controlar o influenciar sus acciones, haciéndoles creer que actúan de forma libre.
Manipulación en el lugar de trabajo
En el entorno laboral, la manipulación se manifiesta de varias formas. Puede ser sutil y difícil de detectar, como por ejemplo a través de la distorsión de la información, la influencia emocional o el enfrentamiento consciente de colegas entre sí. Los manipuladores aprovechan las inseguridades, los miedos o la lealtad para alcanzar sus propios objetivos o para generar drama por diversión, sin importarles las consecuencias para los demás. Esto puede llevar a un entorno laboral estresante donde los empleados se sienten abrumados, manipulados o tratados de manera injusta. En tales situaciones, es necesario resistirse.
Fuentes de la manipulación
La manipulación en el lugar de trabajo puede provenir de diferentes fuentes. A menudo, son los superiores que abusan de su posición de poder para controlar y dirigir a sus empleados. Pero también los colegas o subordinados pueden adoptar comportamientos manipulativos para obtener ventajas personales o para destacarse en una organización. Partes externas como socios comerciales o clientes también pueden intentar cambiar la dirección de proyectos o decisiones a través de una influencia sutil.
Estas personas pueden ser responsables de la manipulación:
- Superiores
- Colegas
- Subordinados
- Socios comerciales
- Clientes
Por qué las personas utilizan técnicas manipuladoras
No todas las personas manipulan conscientemente. De hecho, solo un pequeño porcentaje de personas utilizan la manipulación de forma deliberada y premeditada. A menudo, esto sucede de manera inconsciente y está arraigado en las interacciones interpersonales. Un ejemplo de esto es mi hijo de 11 años, que desde pequeño manipula a su abuela sin que nadie le haya enseñado nunca a hacerlo. Simplemente percibe sus debilidades y las aprovecha para obtener golosinas. Esta manipulación intuitiva demuestra que muchas personas manipulan sin darse cuenta o sin darle un contexto negativo.
Las personas manipulan por diferentes razones:
- Inseguridad: Para sentirse más seguros o superiores.
- Miedo: Al rechazo, conflictos o fracasos.
- Búsqueda de poder: Para obtener control sobre otros.
- Interés propio: Para alcanzar objetivos personales o ventajas.
- Protección: Para resguardarse de amenazas percibidas o situaciones desagradables.
- Gusto por el drama: Los conflictos y el drama proporcionan entretenimiento y chismes.
Objetivos de la manipulación
Los objetivos de las manipulaciones son diversos y a menudo se centran en obtener ventajas personales o reforzar la propia posición. Entre los objetivos más comunes se encuentran:
- Obtener control: Sobre personas o situaciones, para ejercer poder.
- Impulsar intereses propios: Independientemente de las necesidades o deseos de otros.
- Evitar conflictos: Dirigiendo sutilmente para evitar situaciones incómodas.
- Reconocimiento y estatus: A través del engaño o la exageración para mejorar la propia posición.
- Ocultar verdaderas intenciones: Para no ser reconocido como el verdadero mentor detrás de decisiones o acciones.
En qué empresas florecen las manipulaciones
Las manipulaciones prosperan especialmente en lugares donde no existen reglas claras, estructuras fijas y un sistema establecido de medición del rendimiento. En empresas sin KPI (Indicadores Clave de Desempeño) claros o sistemas de evaluación basados en el desempeño, los manipuladores pueden aplicar sus tácticas de forma inadvertida con mayor facilidad. Si un jefe no reconoce que un empleado está descuidando sus tareas reales para interferir en asuntos ajenos, o si la eficiencia de un empleado es inusualmente baja, es una clara señal de que algo no está bien en el equipo. En estos entornos, la actividad manipulativa a menudo pasa desapercibida y puede incluso prosperar, ya que la falta de transparencia y objetivos claros facilita a los manipuladores seguir sus estrategias sin obstáculos.
Consecuencias de la manipulación para el empleado y la empresa
Una persona que es manipulada siempre siente a nivel inconsciente que está siendo utilizada. Este sentimiento a menudo conduce a emociones negativas como frustración, irritación y agresividad pasiva. Dependiendo de las técnicas de manipulación utilizadas, estos sentimientos pueden ser amplificados por sensaciones adicionales como la ofensa o la culpabilidad.
Consecuencias para el empleado que está siendo manipulado
- Síndrome de burnout: La constante presión psicológica y la sensación de ser explotado pueden llevar a la agotamiento emocional y al síndrome de burnout.
- Agotamiento mental: La manipulación consume los recursos mentales del empleado, lo que conduce a fatiga crónica y una sensación de abrumamiento.
- Baja autoestima: La manipulación constante puede hacer que el empleado dude de sí mismo y desarrolle la sensación de ser inferior.
- Resentimiento y ofensa: La sensación de ser tratado injustamente o explotado puede llevar a un resentimiento profundo y a una ofensa duradera.
- Sentimientos de culpa: Técnicas manipuladoras como el chantaje emocional pueden llevar al empleado a desarrollar sentimientos de culpa infundados.
- Retirada e aislamiento: Por miedo a más manipulación, el empleado puede comenzar a alejarse de sus compañeros y a aislarse socialmente.
Efectos negativos en el equipo y la empresa
La manipulación tiene consecuencias graves no solo para el empleado afectado, sino también para todo el equipo y la empresa. Cuando un empleado percibe comportamientos manipulativos en otros, la confianza dentro del equipo puede verse considerablemente afectada. Los empleados que desconfían mutuamente trabajan menos efectivamente juntos, lo que lleva a una disminución significativa en la productividad. El ambiente laboral se vuelve cada vez más tóxico, y puede haber una fragmentación en el equipo a medida que la colaboración y la comunicación abierta se ven afectadas. Los buenos empleados no toleran una cultura empresarial así y eventualmente renuncian.
En última instancia, la manipulación perjudica a toda la empresa. Un entorno en el que prevalece la desconfianza y la incertidumbre no puede lograr éxitos sostenibles. La productividad disminuye, la rotación de personal aumenta, y la empresa puede tener dificultades para alcanzar sus objetivos a largo plazo. Además, la reputación de la empresa puede verse afectada si se sabe que conflictos internos y manipulaciones afectan el ambiente laboral.
¿Manipulación o motivación?
La motivación puede ser considerada como una forma de manipulación, aunque existe una clara diferencia. La manipulación se suele utilizar en un contexto negativo, ya que tiene como objetivo influir en las personas de forma inconsciente o en contra de su voluntad, a menudo en beneficio del manipulador. En cambio, la motivación se emplea con una consecuencia positiva (por ejemplo, un bono o la posibilidad de un ascenso) para hacer que alguien realice una tarea de manera más efectiva o comprometida, y busca despertar la convicción y la entusiasmo interno de la persona.
Un ejemplo: Un superior podría manipular a un empleado haciéndole sentir que solo es valioso si hace horas extras. Sin embargo, ese mismo superior también podría motivar al empleado explicando la importancia de su trabajo y mostrándole cómo sus esfuerzos contribuyen al éxito de todo el equipo. Mientras que la manipulación coloca al empleado bajo presión, la motivación fortalece su confianza y su disposición a rendir.
Convicción
La convicción es una forma sutil de influencia que a menudo roza la manipulación. Un ejemplo sería cuando un superior explica a un empleado por qué una tarea en particular es importante y lo lleva a asumir esa tarea por iniciativa propia. Aunque se ejerce cierta forma de influencia, el empleado siente que ha tomado la decisión por sí mismo.
Inspiración
La inspiración va más allá de la simple convicción y busca motivar a alguien inspirándolo a alcanzar su máximo rendimiento. Un superior que arrastra a su equipo con su propia pasión y visión inspira a sus empleados a dar lo mejor de sí mismos. Un ejemplo sería un discurso apasionado que lleve al equipo a abordar un proyecto difícil con renovado entusiasmo. Esto puede considerarse como una forma de manipulación positiva, ya que guía al equipo en una dirección que es beneficiosa para todos.
Elogio
El elogio también puede considerarse como una técnica manipulativa cuando se utiliza estratégicamente para fomentar ciertos comportamientos. Un superior que elogia a un empleado por una tarea bien realizada lo incentiva sutilmente a seguir comportándose de la misma manera en el futuro. Aquí se refuerza positivamente el comportamiento del empleado, lo que es una forma de manipulación basada en el reconocimiento y la recompensa.
Pedido
Una petición puede ser una forma encubierta de manipulación en una jerarquía. Cuando un superior le pide un favor a un empleado, generalmente espera que se cumpla la tarea, incluso si se presenta como voluntaria. El empleado puede sentirse presionado para cumplir la petición, aunque preferiría no hacerlo. Un ejemplo podría ser cuando un jefe "pide" a un empleado que trabaje los fines de semana y este se siente obligado a hacerlo porque la petición viene de arriba.
Tarea asignada
La forma en que se asigna una tarea también puede contener elementos manipulativos. Un superior podría formular una tarea de manera que se presente como especialmente importante o desafiante para motivar al empleado a ejecutarla con más entusiasmo. Un ejemplo sería describir un proyecto como "crucial para el éxito de la empresa", aunque en realidad sea solo una de muchas tareas. El empleado se sentirá más comprometido y dedicará más energía de la que habría invertido con una presentación neutral de la tarea.
En todos estos casos, la línea entre la manipulación y la motivación se difumina. Mientras que la manipulación a menudo tiene connotaciones negativas al restringir la libertad individual, la motivación puede verse como una forma positiva de influencia que busca sacar lo mejor del empleado. En última instancia, todo depende de la intención y el contexto en el que se utilicen estas técnicas.
Manipulación: Cómo identificarla
La manipulación en el lugar de trabajo puede ser difícil de detectar, especialmente cuando es sutil y oculta. Sin embargo, hay algunas señales que pueden indicarte que alguien está tratando de manipularte. Estas señales incluyen sensaciones físicas, reacciones emocionales y señales no verbales del manipulador.
Sensaciones físicas
Una de las primeras señales de manipulación pueden ser reacciones físicas. Cuando alguien intenta manipularte, tu cuerpo a menudo reacciona con palpitaciones aceleradas, tensión muscular o una sensación de presión en el pecho. Si durante una conversación con una persona en particular notas que tu corazón late más rápido o experimentas una incomodidad interna inexplicable, podría ser una señal de que están intentando manipularte.
Emociones inusuales
La manipulación puede provocar emociones que son atípicas para ti en situaciones normales. Estas emociones pueden incluir:
- Sensación de injusticia o resentimiento: Una incomodidad interna con lo dicho, sentir que estás siendo utilizado o engañado.
- Deseo repentino de complacer o probarse a sí mismo: Una necesidad repentina de causar una buena impresión o demostrar tu competencia.
- Presión emocional: Sentimiento intensificado de miedo o temor, como si estuvieras bajo presión para cambiar algo de inmediato para cumplir con las expectativas.
- Duda sobre tu profesionalidad: Cuestionar de repente tus habilidades y tu juicio, aunque antes estabas seguro de ti mismo.
- Compasión excesiva o lástima: Un fuerte sentimiento de compasión hacia la otra persona en la conversación, que resulta en postergar tus propios intereses.
Si experimentas estas emociones al interactuar con alguien en particular, podría ser una señal de que estás siendo manipulado.
Señales no verbales del manipulador
Los manipuladores a menudo delatan sus intenciones a través de señales no verbales, incluso si sus palabras suenan convincentes. Estas señales incluyen contacto visual intenso o evitativo, sonrisas artificiales, gestos nerviosos o cambios en el tono de voz. Un manipulador podría, por ejemplo, asentir exageradamente para simular acuerdo, o evitar tu mirada para ocultar sus verdaderas intenciones. Observar atentamente estas señales puede ayudarte a identificar la manipulación y protegerte de su influencia.
Emociones a las que los manipuladores apuntan para usarte
Los manipuladores aprovechan deliberadamente ciertas emociones para influenciarte y involucrarte en sus propósitos. Juegan con tus sentimientos para que hagas cosas que quizás no desees hacer o que no estén en tu mejor interés. Aquí tienes algunas de las emociones más comunes a las que apuntan los manipuladores, y cómo lo hacen.
Miedo
El miedo es una emoción poderosa que los manipuladores a menudo utilizan para controlarte. Podrían hacerte creer que perderás tu trabajo si no completas una tarea específica, o que serás excluido del grupo si no sigues la corriente. Un ejemplo podría ser cuando un colega insinúa que tendrás problemas con el jefe si no asumes de inmediato una tarea específica, aunque esa tarea no sea realmente parte de tus responsabilidades.
Culpa
Los manipuladores a menudo utilizan sentimientos de culpa para llevar a cabo ciertas acciones. Te hacen creer que estás abandonando a alguien o no cumpliendo con tus deberes si no sigues sus deseos. Un ejemplo sería cuando un colega te recuerda cuánto te ha ayudado para que aceptes hacer su trabajo, aunque ya tengas suficiente trabajo.
Vanidad
Tu autoestima y tu necesidad de reconocimiento también pueden ser explotadas de manera manipulativa. Un manipulador podría elogiarte excesivamente para acariciar tu ego y luego convencerte de hacer algo por él. Un ejemplo es cuando te dicen que solo tú puedes resolver una tarea particularmente difícil, aunque quizás no sea tan compleja y el manipulador simplemente quiera delegar su trabajo en ti.
Sentido del deber
Un fuerte sentido del deber puede hacerte susceptible a la manipulación. Los manipuladores lo utilizan al convencerte de que es tu responsabilidad completar una tarea específica o ayudar a alguien, incluso si no está justificado. Un ejemplo sería insinuarte que todo el equipo depende de ti y que eres el único responsable del éxito de un proyecto.
Compasión
La compasión es una emoción que los manipuladores a menudo utilizan para que cumplas sus deseos. Se presentan a sí mismos como necesitados o como víctimas para despertar tu compasión y llevarte a ayudarlos, incluso si eso te trae desventajas. Un ejemplo podría ser cuando un colega enfatiza constantemente lo saturado y estresado que está para persuadirte a asumir sus responsabilidades.
Al ser consciente de las emociones a las que apuntan los manipuladores, puedes reconocer mejor cuando alguien intenta usarte para sus propios fines y protegerte en consecuencia.
Consejos para manipular a las personas: Qué decir
La manipulación se basa a menudo en ciertas técnicas lingüísticas que influencian al interlocutor y lo hacen actuar en tu interés. Aquí tienes algunos ejemplos de tales técnicas y cómo puedes aplicarlas.
Preguntas retóricas que no permiten discusión y evalúan la acción del interlocutor
Estas preguntas dan la impresión de que la respuesta es obvia, cuestionando la acción o la motivación del otro. Ejemplo: "¿Realmente crees que tu trabajo merece una alta valoración?"
Comparación con otra persona y degradación
Esta técnica tiene como objetivo menospreciar los logros del interlocutor al compararlo con un colega más exitoso. Ejemplo: "Sabine siempre entrega sus informes puntualmente, mientras que tú tienes problemas con eso."
Insinuaciones indirectas sobre las debilidades del interlocutor
Se hacen insinuaciones que hacen que el interlocutor dude de sí mismo y lo llevan a actuar en interés del manipulador. Ejemplo: "Necesitamos personas que quieran obtener resultados, no solo pasar el tiempo."
Dudas sobre la corrección de la opinión del interlocutor
Esta técnica cuestiona la opinión del interlocutor y lo obliga a defender su posición, poniéndolo en una posición más débil. Ejemplo: "Si realmente es así como dices, ¿por qué todavía no hay resultados?"
Opción sin una verdadera elección, solo una ilusión
Se crea la ilusión de tener una opción, pero ambas opciones conducen al mismo resultado deseado por el manipulador. Ejemplo: "Puedes decidir por ti mismo, seguir siendo parte del equipo o seguir oponiéndote."
Transición a la persona en lugar del tema
La discusión se desvía del tema real a las características personales del interlocutor para evitar abordar el problema. Ejemplo: "Es extraño escuchar algo así de alguien que rara vez participa en proyectos conjuntos."
¿Por qué siempre ser tan objetivo cuando también puedes ser personal?
André Heller
Literato austriacoExageración de hechos hasta lo absurdo
Esta técnica se utiliza para desacreditar ideas o propuestas al llevarlas al extremo ridículo. Ejemplo: "Bueno, si este proyecto es tan importante, ¡entonces simplemente posterguemos todas las demás tareas!"
Axiomas falsos, generalización
Estas afirmaciones se presentan como algo obvio, lo que obliga al interlocutor a estar de acuerdo sin pensar. Ejemplo: "Cualquier profesional sabe que esta es la única solución correcta."
Falsa conclusión lógica - falacia
Esta técnica hace creer que un hecho se deriva lógicamente de otro, cuando en realidad no es así. Ejemplo: "Todas las personas exitosas trabajan siguiendo este método, por lo tanto, seguramente también funcionará para ti."
Referencia a las virtudes del interlocutor, adulación oculta
El manipulador utiliza la adulación para hacer sentir al interlocutor importante y llevarlo a tomar la decisión deseada. Ejemplo: "Solo alguien con tu experiencia podría hacer frente a esta tarea."
Cómo no reaccionar ante la manipulación
Ya estamos familiarizados con la teoría de la manipulación, ahora pasemos a la práctica. Es importante no solo reconocer que se está siendo manipulado, sino también saber cómo reaccionar adecuadamente. Aquí tienes los pasos que te ayudarán a enfrentarte con éxito a la manipulación.
1. Reconoce la manipulación
El primer paso es reconocer cuando alguien intenta manipularte. Analiza la conversación y tus sentimientos con atención. Ejemplo: Un colega sugiere que te quedes después del trabajo para ayudar en un proyecto, aunque no es tu responsabilidad. Si sientes tensión interna o presión, podría ser un signo de manipulación.
2. Reconoce los verdaderos motivos de tu interlocutor
Después de reconocer la manipulación, pregúntate: "¿Por qué esta persona dice o hace esto?". Comprende qué impulsa al interlocutor: tal vez quiera delegar su trabajo en ti o alcanzar sus objetivos a tu costa. Ejemplo: El colega que pide ayuda realmente quiere evitar cargas adicionales y te las está pasando a ti.
3. Toma una decisión que beneficie a tus propios intereses
Una vez entiendas los motivos reales de tu interlocutor, reflexiona sobre tus propios intereses. Es importante no ceder a la presión y tomar una decisión que te beneficie. Ejemplo: Te das cuenta de que las horas extra no son beneficiosas para ti, y decides rechazarlas para ahorrar tus recursos para tareas más importantes.
4. Posiciónate claramente
Expresa tu posición de manera clara y segura. Es importante no justificarse, sino comunicar con calma y firmeza tu decisión. Ejemplo: "Entiendo que el proyecto es importante, pero tengo mis propias responsabilidades y no puedo quedarme después del trabajo. Discutamos cómo organizar el apoyo durante el horario laboral regular." Esto demuestra que conoces tus límites y estás dispuesto a defenderlos.
5. Discute los próximos pasos
Después de dejar clara tu posición, discute con tu interlocutor cómo quieren colaborar en el futuro. Esto ayuda a evitar más intentos de manipulación y fortalece las relaciones laborales. Ejemplo: "En el futuro, cuando se necesite ayuda en tales proyectos, planifiquemos la carga de trabajo con anticipación para que todos tengan suficiente tiempo y recursos." Así estableces reglas claras para la colaboración que tienen en cuenta los intereses de todas las partes involucradas.
Ahora sabes cómo reconocer el peligro de ser manipulado y cómo responder adecuadamente. Estos pasos te ayudarán a enfrentarte de manera efectiva a intentos de manipulación y proteger tus intereses.
Consejos para líderes: Cómo reducir las manipulaciones en el equipo
Crear un ambiente laboral saludable es una de las tareas más importantes de un líder. Esto no solo fomenta la productividad, sino que también previene manipulaciones, conflictos e insatisfacción en el equipo. A menudo, los líderes intentan inferir sobre las características sociales de los candidatos con preguntas personales en la entrevista para detectar temprano a los individuos manipuladores. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo organizar el trabajo para minimizar la posibilidad de manipulaciones en el equipo.
1. Establecer objetivos y expectativas claras
Cada empleado debe comprender claramente sus tareas, objetivos y los resultados esperados. Esto ayuda a evitar malentendidos y manipulaciones derivadas de la falta de claridad. Cuando todos saben qué se espera de ellos, es más difícil transferir la responsabilidad a otros.
2. Implementar un sistema de evaluación y retroalimentación transparente
El feedback regular y honesto ayuda a los empleados a reconocer sus éxitos y áreas de mejora. La transparencia en la evaluación del rendimiento evita injusticias y descontento, y elimina la posibilidad de manipular mediante influencias en los líderes. Un sistema de indicadores clave de desempeño y reuniones individuales regulares ayudan a rastrear el progreso y, si es necesario, corregir el rumbo.
3. Fomentar la comunicación abierta
Alienta a tus empleados a compartir sus ideas, opiniones y problemas sin miedo a críticas o castigos. La comunicación abierta promueve la confianza y reduce el riesgo de conflictos ocultos y manipulaciones. Reuniones regulares de equipo y encuestas anónimas pueden ayudar a identificar problemas y sugerencias ocultas.
4. Fortalecer el espíritu de equipo
Fomenta el espíritu de equipo a través de actividades, proyectos y entrenamientos en común. Cuando los empleados se sienten parte de un equipo, tienen menos probabilidad de caer en manipulaciones y conflictos. Eventos de construcción de equipos, almuerzos grupales y celebración de logros ayudan a crear cohesión y aumentar la motivación.
5. Garantizar una distribución justa de tareas
Es importante asegurarse de que las tareas y la carga de trabajo se distribuyan de forma equitativa y justa. Esto evita manipulaciones por parte de empleados que intentan evitar responsabilidades y reduce el riesgo de agotamiento en aquellos que están sobrecargados. Utiliza la planificación de recursos y la distribución de tareas de manera que cada empleado esté óptimamente involucrado.
6. Establecer y hacer cumplir reglas
Normas y procedimientos claros ayudan a mantener la disciplina y a eliminar la posibilidad de manipulaciones. Cuando todos saben que las reglas se aplican de igual manera para todos, el ambiente en equipo se vuelve más justo y productivo. Establece reglas de comportamiento y directrices de interacción y asegúrate de que se cumplan de manera consistente.
7. Abordar los problemas a tiempo
No dudes en abordar los problemas emergentes. Cuanto antes intervengas en una situación, menos probable será que se convierta en un conflicto grave o afecte negativamente el ambiente laboral. La monitorización regular del estado del equipo y la intervención rápida ante los primeros signos de tensiones ayudan a mantener un clima laboral positivo.
Conclusion
Imagina un patio de recreo: cada niño en el grupo normalmente no desea hacerle daño a nadie, pero todos quieren alcanzar su objetivo. Algunos intentan hacer que otros jueguen según sus reglas, otros se quejan para llamar la atención, y otros utilizan su encanto para conseguir lo que quieren. Estos son ejemplos inocentes de manipulación, pero muestran claramente cómo en las situaciones más simples sale a relucir el deseo de influir en los demás.
En el lugar de trabajo, escenarios como estos pueden desarrollarse con consecuencias mucho más graves. Abordar la manipulación requiere una comprensión teórica y la habilidad para aplicar ese conocimiento en la práctica. Saber cómo reconocer la manipulación, responder adecuadamente y prevenir su ocurrencia ayuda a crear un ambiente laboral sano y productivo.
Cada miembro del equipo desempeña un papel importante en mantener la honestidad y la apertura en el lugar de trabajo. Los líderes deben trabajar activamente para minimizar las oportunidades de manipulación, establecer reglas claras, garantizar la transparencia y fomentar la comunicación abierta.
Ahora tienes el conocimiento y las herramientas necesarias para enfrentar con éxito intentos de manipulación y crear un clima de confianza y colaboración en tu equipo. Siguiendo estos principios, no solo te protegerás de influencias manipuladoras, sino que también contribuirás al fortalecimiento del equipo y al logro de objetivos comunes.